Lectio Divina

“Fueron contados sus huesos, fue escarnecido, repartieron sus vestiduras y echaron a suerte su túnica, lo rodearon enfurecidos y crueles, y dispersaron todos sus huesos”

Señor, en este día tan especial, ayúdanos a dejar muchas cosas de lado y a centrar toda la atención en Ti.

Señor, ayúdanos a valorar lo que significa vivir en sintonía de amor contigo, para tener tus mismas actitudes y tus mismas disposiciones a lo largo de cada momento de lo que nos toca vivir, para que así como Tú, sepamos buscar la voluntad de Dios en todo lo que pensamos, deseamos y hacemos.

Señor, gracias; gracias por amarnos tanto, gracias por el amor sin límites que tienes por nosotros; gracias porque Tú eres un Dios fascinante y maravilloso, que nos muestras tu interés, tu preocupación, tu solidaridad, tu cercanía hacia nosotros.

Jesús no sólo cura, sino que quiere que la persona “limpiada”, pueda de nuevo convivir con los otros.